Madagascar

Es una nación insular situada en el océano Índico frente la costa sudeste del continente africano, a la altura de Mozambique, cuyo 60 % de la población vive bajo el umbral de la pobreza.  Los colectivos con más riesgo de exclusión social son, desde siempre, la infancia y las mujeres. La combinación de las carencias que sufren las escuelas con la necesidad por parte de los menores de trabajar para llevar recursos a sus familias deriva en un índice de escolaridad muy bajo, donde el absentismo y el fracaso escolar son habituales, especialmente en la provincia de Tuléar, donde se concentran nuestras actividades.

Esta situación acerca a riesgos y malos hábitos como la delincuencia, la prostitución o el consumo de drogas, empeorando la situación de grave precariedad en la que viven los y las menores en el seno de sus familias. El problema se intensifica en el caso concreto de las niñas, cuya asistencia a la escuela se ve reducida drásticamente por las convenciones sociales como la costumbre de los matrimonios y los embarazos precoces, entre otras cuestiones.

En Madagascar actuamos para dar respuesta a las necesidades de las comunidades de Tuléar y Fianarantsoa, cuya situación económica y social todavía deja fuera a tantas personas sin recursos que encuentran muchas dificultades para sobrevivir, y donde consideramos la educación como la herramienta imprescindible para que estas personas puedan ser protagonistas de su propio desarrollo.