Camboya
Es un país emergente, que ha sufrido décadas de guerra civil y estancamiento económico y ha evolucionado para convertirse en una economía dinámica en la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático. A día de hoy, es un país de renta baja, caracterizado por una elevada desigualdad interna por ingresos.
Desde el año 2004 la industria textil, la agricultura, la construcción y el turismo han sido la base del crecimiento económico del país. No obstante Camboya continúa siendo uno de los países más pobres de Asia, donde las posibilidades de un desarrollo económico sostenido a largo plazo se ven limitadas por la corrupción, las carencias en el acceso a los servicios básicos (educación y salud), la elevada desigualdad de ingresos y la precariedad laboral. Aproximadamente cuatro millones de personas viven con menos de 1,25 dólares al mes (más de dos de cada cinco personas) y el 32,4 % de los niños camboyanos menores de cinco años sufre malnutrición crónica.
En Camboya nuestros esfuerzos se concentran en el refuerzo del sistema educativo en la provincia de Battambang, en el norte del país, donde se registra una alta tasa de abandono escolar y un alto índice de desigualdad social.