Ilustración de Myriam de Pablos

¿Qué pasa con con los océanos?

Aunque no lo creamos, el océano impulsa los sistemas mundiales que hacen de nuestro planeta un lugar habitable para el ser humano. Nuestra lluvia, el agua potable, el tiempo, el clima, los litorales, gran parte de nuestra comida e incluso el oxígeno del aire que respiramos los proporciona y regula el mar.

Por ello, una gestión cuidadosa de este recurso mundial esencial es una característica clave de un futuro sostenible. No obstante, en la actualidad, existe un deterioro continuo de las aguas costeras debido a la contaminación y a la acidificación de los océanos que está teniendo un efecto adverso sobre el funcionamiento de los ecosistemas y la biodiversidad. Asimismo, también está teniendo un impacto perjudicial sobre las pesquerías de pequeña escala.

La biodiversidad marina es vital para la salud de las personas y de nuestro planeta, y debemos responsabilizarnos de su cuidado.

 

  • ¿En qué consiste el Objetivo 14 para el Desarrollo Sostenible?

Dada el papel tan importante que tiene en la proporción de recursos naturales fundamentales como alimentos, medicinas, biocombustibles y otros productos. Así como, contribuyendo a la descomposición molecular ya la eliminación de los desechos y la contaminación, y sus ecosistemas costeros actúan como amortiguadores para reducir los daños causados por las tormentas. Resulta fundamental conservar y utilizar sosteniblemente los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible.

Para ello la ONU ha marcado una serie de metas para ir alcanzando este objetivo:

14.1 De aquí a 2025, prevenir y reducir significativamente la contaminación marina de todo tipo, en particular la producida por actividades realizadas en tierra, incluidos los detritos marinos y la polución por nutrientes

14.2 De aquí a 2020, gestionar y proteger sosteniblemente los ecosistemas marinos y costeros para evitar efectos adversos importantes, incluso fortaleciendo su resiliencia, y adoptar medidas para restaurarlos a fin de restablecer la salud y la productividad de los océanos

14.3 Minimizar y abordar los efectos de la acidificación de los océanos, incluso mediante una mayor cooperación científica a todos los niveles

14.4 De aquí a 2020, reglamentar eficazmente la explotación pesquera y poner fin a la pesca excesiva, la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada y las prácticas pesqueras destructivas, y aplicar planes de gestión con fundamento científico a fin de restablecer las poblaciones de peces en el plazo más breve posible, al menos alcanzando niveles que puedan producir el máximo rendimiento sostenible de acuerdo con sus características biológicas

14.5 De aquí a 2020, conservar al menos el 10% de las zonas costeras y marinas, de conformidad con las leyes nacionales y el derecho internacional y sobre la base de la mejor información científica disponible

14.6 De aquí a 2020, prohibir ciertas formas de subvenciones a la pesca que contribuyen a la sobrecapacidad y la pesca excesiva, eliminar las subvenciones que contribuyen a la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada y abstenerse de introducir nuevas subvenciones de esa índole, reconociendo que la negociación sobre las subvenciones a la pesca en el marco de la Organización Mundial del Comercio debe incluir un trato especial y diferenciado, apropiado y efectivo para los países en desarrollo y los países menos adelantados ¹

14.7 De aquí a 2030, aumentar los beneficios económicos que los pequeños Estados insulares en desarrollo y los países menos adelantados obtienen del uso sostenible de los recursos marinos, en particular mediante la gestión sostenible de la pesca, la acuicultura y el turismo

14.a Aumentar los conocimientos científicos, desarrollar la capacidad de investigación y transferir tecnología marina, teniendo en cuenta los Criterios y Directrices para la Transferencia de Tecnología Marina de la Comisión Oceanográfica Intergubernamental, a fin de mejorar la salud de los océanos y potenciar la contribución de la biodiversidad marina al desarrollo de los países en desarrollo, en particular los pequeños Estados insulares en desarrollo y los países menos adelantados

14.b Facilitar el acceso de los pescadores artesanales a los recursos marinos y los mercados

14.c Mejorar la conservación y el uso sostenible de los océanos y sus recursos aplicando el derecho internacional reflejado en la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, que constituye el marco jurídico para la conservación y la utilización sostenible de los océanos y sus recursos, como se recuerda en el párrafo 158 del documento “El futuro que queremos”

¹ Teniendo en cuenta las negociaciones en curso de la Organización Mundial del Comercio, el Programa de Doha para el Desarrollo y el mandato de la Declaración Ministerial de Hong Kong.

 

  • TÚ PUEDES HACER UN OCÉANO MÁS SOSTENIBLE: ALGUNOS CONSEJOS PARA PONER EN PRÁCTICA
  • Elimina todo lo posible el uso de plásticos
  • ¿Vives cerca de la playa? Organiza limpiezas 
  • A nivel local, al comprar productos o consumir alimentos procedentes de los océanos deberíamos tomar decisiones respetuosas con los mismos y consumir solamente lo que necesitamos. Elegir productos certificados es una buena forma de empezar. 
  • Lo que para ti son pequeños cambios, puede reducir nuestra huella de carbono, un factor que contribuye al aumento del nivel del mar. Por ejemplo:
    • utiliza el transporte público,
    • desconecta los aparatos electrónicos,
    • ahorra energía.
  • ¿Cómo contribuimos en Agua de Coco con este ODS?

La educación que reciben todos los y las estudiantes siempre tiene una base en una formación integral sobre diferentes temas relacionados con la importancia de proteger el medioambiente y la biodiversidad y además aprenderán y utilizarán técnicas agrícolas y ganaderas no invasivas.

Además, el fomento de la producción local disminuye bastante el impacto ambiental negativo, impulsado así, un modelo económico y medioambiental sostenible.

También, es menester señalar como el los últimos años se ha optado desde la fundación por llevar a cabo todas las medidas posibles para reducir los consumos y preservar el medio ambiente. Los edificios están construidos para que no necesiten aire acondicionado. La energía es suministrada al 100% por una central fotovoltaica, las luces son LED y el refrigerador tiene el máximo aislamiento. El agua proviene de cuatro pozos que suman 150 m3 por día,  cuyo suministro es proporcionado por bombas solares. Los desechos se clasifican y transforman en compost (unos 600 m3 por año) o se queman en un horno de doble cámara de combustión para limitar las emisiones a la atmósfera. El agua potable es proporcionada por filtración.