Artículo escrito por Tsihindiny Tafita Laurencia Mabelle, Comunity Manager de ONG Bel Avenir.

La moringa, a menudo apodada «el árbol milagroso», desempeña un papel clave en la lucha contra la desnutrición y el desarrollo sostenible. Durante una visita organizada por la ONG Bel Avenir, pudimos descubrir las diferentes etapas de su cultivo y transformación, así como su impacto positivo en las comunidades locales. En la región de Toliara, los agricultores adoptan cada vez más la moringa debido a su resistencia a la sequía. Como pudimos observar con Madame Jeanne, responsable de producción, su cultivo no sólo ayuda a preservar el suelo, sino que también ofrece una fuente de ingresos sostenible a los productores locales.

Después de la cosecha, las hojas de moringa se secan cuidadosamente en estantes de madera, en un espacio aireado y protegido de la luz que preserva sus propiedades nutricionales. Este proceso es crucial para asegurar un polvo rico en vitaminas, minerales y antioxidantes, que luego será utilizado como complemento dietético o ingrediente en diversos productos para la salud. Además del método tradicional, otra técnica popular para conservar los nutrientes es el secado al sol en un horno solar. Este método tiene varias ventajas y se utiliza cada vez más en regiones donde la energía es limitada y el respeto por el medio ambiente es una prioridad.

La moringa no se limita al consumo alimentario. La ONG Bel Avenir también fomenta su transformación en diversos productos, entre ellos el aceite de moringa, reconocido por sus virtudes cosméticas y medicinales, así como el polvo de moringa, que puede utilizarse como complemento nutricional o añadirse a diversos platos por sus propiedades beneficiosas. Al apoyar la producción local, la ONG ayuda a las comunidades a diversificar sus fuentes de ingresos y aprovechar al máximo esta planta con múltiples beneficios.

Gracias al apoyo de organismos internacionales y empresas locales, muchos productores de la región se benefician de capacitación y equipamiento para mejorar su producción. Este proyecto no sólo ayuda a combatir la desnutrición, sino que también ofrece nuevas oportunidades económicas a las comunidades locales. Por tanto, el cultivo de moringa forma parte de un enfoque sostenible, beneficioso para el medio ambiente y la población.

La ONG Bel Avenir participa activamente en su cultivo y continúa promocionando esta planta con innumerables virtudes, demostrando que la innovación agrícola puede ser un motor de desarrollo sostenible. A través de estas iniciativas, contribuye activamente a la seguridad alimentaria y el bienestar de las comunidades locales.

Desde la ONG Bel Avenir queremos expresar nuestro más sincero agradecimiento a los socios y donantes que apoyan nuestros esfuerzos para promover el cultivo de moringa. Su compromiso hizo posible la realización de este proyecto, que contribuye no sólo a la lucha contra la desnutrición, sino también al desarrollo sostenible de las comunidades locales.