• Los músicos Depedro y Kilema protagonizan el documental Fanantenana, que recorre Madagascar para visibilizar la realidad de la infancia y el valor de la música.
  • El Festival de Cine de Madrid – PNR selecciona Fanantenana entre los largometrajes de su sección oficial 
  • El 19 de septiembre a las 21h podrá verse Fanantenana en la Sala Berlanga de Madrid

 

El próximo 19 de septiembre a las 21h la Sala Berlanga de Madrid acogerá la proyección del documental “Fanantenana, Música para la esperanza” en el marco del Festival de Cine de Madrid – PNR. El documental está entre los largometrajes elegidos en la sección oficial del festival.

Fanantenana, Música para la Esperanza

El músico Jairo Zavala también conocido como Depedro viaja a Madagascar junto a Kilema (músico de Madagascar) para conocer la difícil realidad del país y de la infancia. En el sur de la isla conocen un proyecto que inspira esperanza a miles de niños y niñas en una de las zonas más pobres del país, una escuela de música. El largometraje cierra en Granada (España), donde una de las

“Fanantenana, que significa esperanza en malgache, es un viaje hacia un lugar físico y emocional donde la música se convierte en refugio y propulsora de vida” Salud García

Escrita y dirigida por Salud García J-Centurión, Fanantenana es una coproducción de ínsula Sur e Iliada Films en colaboración con Fundación Agua de Coco y ONG Bel Avenir, y cuenta con música de Depedro, Kilema y Malagasy Gospel (coral de gospel nacida en la escuela de música de Fundación Agua de Coco en Madagascar).

Durante la presentación en la Sala Berlanga se contará con la presencia de la directora las motivaciones por las que grabar un documental como este.

 

Madagascar no es país para la infancia

Madagascar es uno de los países más empobrecidos y que más sufre el hambre en el planeta,  se encuentra en el puesto 119 entre los 121 países incluidos en el último Índice Global del Hambre de 2022. La inseguridad alimentaria y la malnutrición son la consecuencia de la pobreza estructural del país provocada por la falta de acceso a la educación, la falta de ingresos en los hogares y la alta dependencia a una agricultura cada vez más inestable como consecuencia de los efectos del cambio climático.

Esta pobreza lleva a la infancia a situación de especial riesgo de explotación laboral, física y sexual, siendo Tulear uno de las zonas calientes del turismo sexual infantil de la isla. Según el Ministerio de Turismo de Madagascar, un 25% de los trabajadores sexuales de Tulear, una zona turística, son menores de 18 años.

En este contexto trabaja Fundación Agua de Coco y ONG Bel Avenir, entidades colaboradoras del documental, desde hace más de 20 años.