Con motivo del lanzamiento de la campaña ¡Más legumbres!, entrevistamos a Nadja Tardiff la coordinadora adjunta de la Granja Escuela Tambohomandrevo. Su papel consiste en asegurar que todas las actividades que se llevan a cabo en la Granja Escuela se desarrollen de la mejor forma posible.
¿Qué legumbres cultiváis en la granja escuela?
Cultivamos todo tipo de legumbres, sobre todo las destinadas a la alimentación, como las judías (verde, blanca, roja), los guisantes y los cacahuetes, y también el flamboyán, una leguminosa ornamental.
¿En qué época del año y cómo plantáis las legumbres?
Plantamos las legumbres mediante la rotación de cultivos. Por ejemplo, plantamos judías verdes fuera de temporada en los arrozales, es decir, justo después de la cosecha de arroz. Plantamos las judías verdes y los guisantes en nuestros huertos, además de otras especies que se siembran entre noviembre y febrero, de acuerdo con una programación de cultivos, para no fatigar demasiado la tierra.
¿Hacéis rotación de cultivos? ¿Para qué sirve?
Sí, practicamos la rotación de cultivos. Este sistema evita la fatiga del suelo, ya que le permite descansar y reponer sus reservas de nutrientes esenciales para el correcto desarrollo de las diferentes plantas.
¿Por qué plantáis legumbres?
Plantamos legumbres principalmente para la alimentación de los alumnos y alumnas, por su importancia ecológica y porque son cultivos muy económicos.
¿Cuáles son los beneficios de la plantación de legumbres para la nutrición y la seguridad alimentaria?
Las legumbres son ricas en proteínas y energía, y algunas también lo son en lípidos. Todos estos elementos son esenciales en la alimentación humana.
¿Cuáles son los beneficios de la siembra de legumbres para el medio ambiente?
Las legumbres tienen la capacidad de fijar el nitrógeno de la atmósfera en el suelo y hacer que el fósforo insoluble del suelo esté más disponible para las plantas. El fósforo y el nitrógeno son los dos elementos más importantes para el crecimiento de las plantas, pero son cada vez más escasos, por lo que a veces es preciso enriquecer la tierra con estos elementos para que sea fértil. Las legumbres «se las arreglan para mantenerse a sí mismas» sin que sea necesario reponer el nitrógeno en el suelo, pues lo toman del aire y absorben el fósforo insoluble para que puedan utilizarlo otras plantas. Ello significa que se reduce la necesidad de emplear insumos y fertilizantes químicos al emplear fertilizantes orgánicos. Estos equilibran el suelo y lo vuelven más fértil, ya que favorecen un mejor rendimiento para las siguientes especies que les siguen en la rotación de los cultivos.
¿Qué hacéis con las legumbres que recolectáis?
Las legumbres recolectadas se destinan a la alimentación del alumnado de la Granja Escuela y a los beneficiarios y beneficiarias de las clases verdes.