Durante el mes de julio, dos grupos de voluntarios que han venido de Francia se unieron al grupo de Coconut Water. Han estado trabajando duro para hacer que la escuela pareciese como nueva: pintaron las paredes de la escuela, repararon en patio de recreo e hicieron jardines orgánicos.
Los voluntarios han organizado también algunos talleres de reciclaje para niños y niñas. El objetivo era concienciar a los alumnos y alumnas sobre el reciclaje pero ¡de una forma divertida! Han usado su imaginación y creatividad para convertir un periódico viejo y botellas de cristal en piezas de decoración. Todo el mundo estaba muy entusiasmado y orgulloso de volver a casa con su creación. Ha sido una experiencia increible tanto para el voluntariado como para los niños y niñas.
