… Tengo por casa unos libros… Mis niños han crecido y he retirado ropa… ¿Recogéis juguetes en Navidad? ….
Todas las semanas recibimos una pregunta generosa y solidaria de alguna persona que quiere dar una segunda vida a sus cosas usadas pero, lamentablemente, la respuesta no puede ser positiva.
¿Por qué no mandamos ropa y/o trastos a Madagascar si no es por necesidad concreta?
Os podemos dar tres respuestas prácticas y otras dos globales. Vamos primero a por las respuestas prácticas:
1) Nuestros proyectos se encuentran a miles de kilómetros de España, y Agua de Coco es una ONG pequeña sin recursos económicos para pagar y fletar un barco con materiales para Madagascar. Este dinero se emplearía de forma más eficiente comprando allí mismo los recursos que se necesitan.
2) Además, las personas destinatarias de nuestro trabajo y las personas del equipo técnico de Madagascar son las que nos piden los materiales prioritarios que puntualmente pudieran necesitar, porque estas personas son las que mejor conocen su realidad diaria y lo materiales que necesitan. Agua de Coco no recoge materiales salvo que sea una petición expresa de dichas personas desde el terreno.
3) Y por último, aunque no menos importante: comprando bienes y servicios en el país favorecemos el mercado local y el desarrollo de las familias con las que trabajamos, y este es nuestro fin último.
En definitiva, sólo se llevan productos que nos haya demandado nuestro equipo en el terreno; que sean difíciles o imposibles de conseguir en el país; y que no puedan ser sustituidos por otro producto local (equipamiento médico, instrumentos musicales, repuestos de maquinaria…).
Y ahora las respuestas globales, nuestras reflexiones internas:
1) Pensamos que el modelo de compra-consumo que existe en nuestra sociedad es erróneo. Consumimos mucho más de lo que necesitamos, empujados por la publicidad, las modas, y el sistema económico en el que vivimos. Esto provoca que cada cierto tiempo tengamos por casa productos en perfecto estado pero que ya no usamos. Nos dice Wikipedia:
“El consumismo inicia su desarrollo y crecimiento a lo largo del Siglo XX como consecuencia directa de la lógica interna del capitalismo y la aparición de la mercadotecnia o publicidad -herramientas que fomentan el consumo generando nuevas necesidades en el consumidor-”
Es decir, que nuestro armario lleno de ropa no es casualidad, nace de una necesidad creada por el mercado. Además, hay que ser conscientes de que consumir más, y de forma creciente y concentrada, exige extraer más recursos naturales y producir más residuos. El modelo de producción, comercialización y consumo actual tiene consecuencias sociales y ambientales.
2) ¿Por qué tendemos a pensar en África como un gran contáiner donde enviar las cosas que aquí ya tiraríamos o regalaríamos, las cosas viejas? ¿Por qué mandar a África ordenadores que ya no funcionan o ya están tan viejos que se hace difícil trabajar con ellos? Lo que ocurre en la mayoría de los casos es que muchas zonas de los países a los que enviamos este material desfasado se convierten en vertederos que contaminan gravemente el entorno y que generan dinámicas sociales muy peligrosas para las niñas y niños, como la explotación laboral infantil. Lo mismo ocurre con otros objetos y materiales con una vida útil corta que acaban abandonados en el río, lago o ciudad en lugares que no tienen una adecuada gestión de los residuos.
Estos son los motivos principales por los que no mandamos objetos no específicamente necesarios a Madagascar y Camboya. Lo mejor es cambiar nuestros hábitos de consumo para que sea responsable, sostenible y solidario. ¡Pronto os daremos algunas ideas ;)!